Movilizando el DUA: recomendaciones tecnológicas para la inclusión desde los servicios de apoyo de universidades españolas Mercé Barrera Ciurana Universitat Jaume I, EspañaMail: ciuranam@uji.esORCID: https://orcid.org/0000-0001-7147-4762 Carmen Márquez Vázquez Universidad Autónoma de Madrid, EspañaMail: carmen.marquez@uam.esORCID: https://orcid.org/0000-0003-0708-6698 Sergio Sánchez Fuentes Universidad Autónoma de Madrid, EspañaMail: sergio.sanchezfuentes@uam.esORCID: https://orcid.org/0000-0002-8783-9911 Odet Moliner García Universitat Jaume I, EspañaMail: molgar@uji.esORCID: https://orcid.org/0000-0002-5318-5489 RESUMEN Este artículo tiene como propósito explorar cómo los recursos tecnológicos recomendados por los Servicios de Atención a Personas con Discapacidad de 14 universidades españolas al profesorado apoyan la implementación del Diseño Universal para el Aprendizaje en el contexto universitario. El enfoque que se ha seguido es cualitativo y para la recogida de datos se han realizado entrevistas se-miestructuradas. Para analizar la información se ha desarrollado un análisis de contenido siguiendo una lógica inductiva y deductiva. Los resultados muestran que gran parte de los recursos recomendados se dirigen a garantizar el acceso a la información y posibilitar diferentes vías para la comunicación. Además, los productos de apoyo se consideran elementos clave para la inclusión del alumnado con discapacidad. Las conclusiones dejan ver que todavía predomina una visión tradicional del DUA centrada en sus primeras ver-siones donde el principio de motivación y compromiso quedaba en segundo plano. Por tanto, es necesario seguir explorando recursos tecnológicos para la motivación y el compromiso del estudiantado, así como un cambio de mirada con respecto al uso de la tecnología, vislumbrando los benefcios de esta no solo para el estudiantado con discapacidad sino para todos. Palabras clave: Diseño Universal para el Aprendizaje, tecnología de la educación, accesibilidad, discapacidad, universidad. Mobilizing UDL: technological recommendations for inclusion from the support services of Spanish universities ABSTRACT This article aims to explore how the technological resources recommended by the Disability Services of 14 Spanish universities to faculty support the implementation of Universal Design for Learning in the university context. The approach followed is qualitative, and semi-structured interviews were conducted for data collection. To analyze the information, a content analysis was developed following both inductive and deductive logic. The results indicate that a signifcant portion of the recommended resources focus on ensuring access to information and enabling diferent pathways for communication. Additionally, assistive products are considered key elements for the inclusion of students with disabilities. The conclusions reveal that there is still a prevalent traditional view of UDL, centered on its early versions where the principles of motivation and engagement took a back seat. Therefore, it is necessary to continue exploring technological resources for student motivation and engagement, as well as a shift in perspective regarding the use of technol- ogy, recognizing its benefts not only for students with disabilities but for everyone. Key words: Universal Design for Learning, educational technologies, accessibility, disability, university. ISSN: 0210-2773DOI: https://doi.org/10.17811/rifie.20815 Volumen 54, número 1, enero-marzo, 2025/págs. 9-17 Esta obra está bajo una licencia internacional Creative CommonsAtribución-NoComercial-SinDerivadas 4.0 9
Mercé Barrera Ciurana, Carmen Márquez Vázquez, Sergio Sánchez Fuentes y Odet Moliner García Volumen 54 número 1, enero-marzo, 2025 / págs. 9-17 10 1. Introducción La educación inclusiva y de calidad es un derecho de todas las personas en cada una de las etapas educativas (ONU, 2015). Concretamente, en la Educación Superior, la Ley Orgánica 2/2023, de 22 de marzo, del Sistema Universitario ratifca que son las universidades quienes deben asegurar el acceso, la formación de calidad, la participación plena y la permanencia en igualdad de oportunidades para todo el estudiantado. Gran parte estas se han responsabilizado de ello y ofrecen respuestas mediante los servicios de apoyo y administrativos o mecanismos de sensibi-lización y formación. Esta apertura de las universidades ha fa-vorecido, según el último estudio sobre la inclusión de personas con discapacidad en el sistema universitario español (Fundación Universia, 2023), el incremento del número de estudiantes con discapacidad, siendo ya más de veintidós mil. A pesar de estos avances en materia de inclusión, todavía persisten barreras que difcultan la participación y aprendizaje de este alumnado, como la ausencia de adaptaciones curricula- res no signifcativas, de ajustes en la evaluación o las relaciones con parte del profesorado (Barrera y Moliner, 2023; Fundación Universia, 2023; Sandoval et al. , 2019). Frente a estas difculta -des, los Servicios de Atención a Personas con Discapacidad de las Universidades (SAPDU, nomenclatura genérica otorgada por la red de trabajo de estos servicios) adquieren un papel funda-mental para la promoción de universidades más inclusivas. En-tre las competencias que asumen estos servicios (denominados servicios, programas u ofcinas, según se gestione en cada uni -versidad) destacan el apoyo al estudiantado, la gestión de adap-taciones y ajustes razonables, la mediación entre estudiantado y profesorado, así como la sensibilización a la comunidad uni-versitaria. A pesar de su encomiable labor, lo cierto es que estos servicios se están enfrentando a algunos desafíos para atender adecuadamente al estudiantado, como la sobrecarga de trabajo por las numerosas solicitudes de adaptaciones y la necesidad de una adecuada y efectiva coordinación con el personal docente (Lovet et al. , 2015; Moliner et al. , 2019). Estas evidencias han provocado un creciente interés en la in- vestigación educativa por tratar de identifcar cómo superar los obstáculos mencionados en la Educación Superior. Algunas de ellas señalan cada vez más para esta etapa el Diseño Universal para el Aprendizaje (DUA) como una estrategia clave para aten-der a la diversidad del alumnado desde una mirada inclusiva. De hecho, a nivel internacional diversos trabajos recomiendan su implementación por sus benefcios no sólo para el alumnado con discapacidad sino para cualquier estudiante al ofrecer alter-nativas para la percepción y la expresión de la información, así como para el compromiso hacia el aprendizaje (Kumar y Wide-man, 2014; Reyes et al. , 2022; Zhang et al. , 2022). Por otra parte, a nivel nacional también existen evidencias que respaldan su im-plementación para garantizar la participación y aprendizaje de todo tipo de estudiantes a pesar de la creciente inquietud por co-nocer cómo llevar sus principios a la práctica (Alba-Pastor, 2019; Díez y Sánchez-Fuentes, 2015). Con respecto a esta última idea, en ambos contextos se destaca el papel de la tecnología como un facilitador para la implementación del DUA al ofrecer un abani-co muy amplio de posibilidades tanto al personal docente como al alumnado (Cabero y Valencia, 2019; McCarthy et al. , 2020; Ru-bio, 2022). Sin duda, los avances tecnológicos han revolucionado sustancialmente las formas de enseñar y aprender, no obstante, continúa siendo necesario explorar desde la voz de los SAPDU cómo los recursos tecnológicos movilizan el DUA en la univer-sidad para seguir avanzando en el desarrollo de prácticas más inclusivas. 1.1. Tecnología y DUA, dos aliados para la inclusión Pensar en tecnología en el ámbito educativo desde esa mira-da inclusiva nos conduce inevitablemente al DUA. Desde este paradigma se contempla la diversidad en un sentido amplio y como una realidad para tener en cuenta desde el momento en que se planifca el proceso de enseñanza y aprendizaje, no des - pués. El DUA implica la fexibilización de las oportunidades para el alumnado, desde los aspectos motivacionales hasta las formas en las que se presenta la información o pueden expre-sar sus conocimientos (Alba-Pastor et al. , 2019). A su vez rompe con la idea del estudiante y currículo promedio entendiendo que cada estudiante aprende de una forma diferente (Rao et al. , 2023). El DUA se articula en un marco de implementación con tres principios clave y sus respectivas pautas y consideraciones (CAST, 2024). Los principios son diseño de múltiples medios de Compromiso, de múltiples medios de Representación y de múltiples medios de Acción y Expresión. Este marco fue dise-ñado en la década de los 90 por el CAST (del inglés, Center for Applied Special Technology) , un centro fundado en Estados Unidos conformado por un equipo multidisciplinar de investigadores e investigadoras. A lo largo de los años el marco ha ido evolucio-nando, dando lugar a diferentes versiones hasta la más reciente, la versión 3.0. Con los aportes de la comunidad investigadora y educativa, esta nueva versión adquiere un enfoque más críti-co al ahondar en las barreras y prejuicios que oprimen a ciertos colectivos y considerar la identidad y la diversidad cultural y personal como parte de la variabilidad en los procesos de apren-dizaje (Sánchez y Alvear, 2024). Asimismo, esta reciente versión cambia el enfoque anteriormente centrado en el profesorado por una propuesta más colaborativa donde tanto profesionales de la educación como estudiantes pueden adoptar un papel activo en la aplicación de sus principios (CAST, 2024). Aunque el CAST aporta pautas y consideraciones para implementar los prin-cipios, este marco no debe entenderse como una receta que ha de desarrollarse por completo y de la misma forma. Es por ello por lo que en la versión 3.0 se reemplaza el concepto de “pun- tos de verifcación” por “consideraciones”, tratando de evitar su percepción como una lista de verifcación y abordando su im -plementación desde un enfoque más abierto (Sánchez y Alvear, 2024). Por tanto, se enfatiza la fexibilidad a la hora de escoger las consideraciones en función del contexto y los objetivos plan- teados, promoviendo la refexión y la creatividad sobre las prác -ticas docentes para innovar, integrar o reforzar elementos que podrían maximizar las oportunidades de aprendizaje para todo el alumnado (Sánchez-Fuentes y Duk, 2022). La relación entre la tecnología y el DUA proviene desde los inicios de este paradigma, dado que originariamente el CAST centraba su atención en diseñar productos tecnológicos accesibles
Mercé Barrera Ciurana, Carmen Márquez Vázquez, Sergio Sánchez Fuentes y Odet Moliner García Volumen 54 número 1, enero-marzo, 2025 / págs. 9-17 11 para las personas con discapacidad. Sin embargo, terminaron ob- servando que estos no solo benefciaban a este colectivo sino al conjunto del estudiantado (Rose et al. , 2012). De ahí que, en el mar-co de implementación, se hagan numerosas referencias al uso de recursos tecnológicos para promover los tres principios. Algunos de los ejemplos son utilizar materiales virtuales, herramientas de asistencia o softwares de conversión texto a voz (CAST, 2024). Si el propósito del DUA es fexibilizar el proceso de enseñanza-apren -dizaje, la tecnología es, sin duda, su gran aliado. Esta permite ampliar los tiempos integrando opciones síncronas y asíncronas, enriquecer los materiales complementándolos con recursos inte-ractivos o generando nuevas oportunidades de aprendizaje para colectivos a menudo olvidados (Cabero y Valencia, 2019; Kumar et al. , 2014). Cabe destacar que, aunque el DUA no depende de la tecnología para su implementación, ambos se complementan para eliminar barreras que pueden comprometer la participación y aprendizaje del alumnado (Rose et al. , 2012). Diversos trabajos relacionan explícitamente la tecnología y el DUA para fomentar el compromiso del estudiante, por ejemplo, utilizando materiales interactivos que permiten captar su inte-rés o proporcionándole retroalimentación mediante plataformas digitales, lo que fomenta su capacidad emocional (McCarthy et al. , 2020; Reyes et al. , 2022; Sala-Bars et al. , 2021). Para apoyar los medios de representación, gran parte de las evidencias se rela-cionan con el acceso a la información y recomiendan el uso de formatos personalizables, materiales virtuales o herramientas para percibir la información por diferentes canales (Barrera y Moliner, 2023; Jwad et al. , 2022). Por otra parte, los productos de apoyo se vinculan generalmente con el principio de acción y ex-presión al permitir el seguimiento de las clases y la realización de las pruebas de evaluación por parte del alumnado con discapaci-dad (Curioso, 2021; Díez-Vega et al. , 2020). Sin embargo, algunos autores consideran que para alinearse con el enfoque DUA, los productos de apoyo deberían ponerse a disposición de todo el estudiantado con el fn de que las utilicen cuando necesiten (Ed -yburn, 2010). Otros aspectos que apoyan este principio son los medios digitales para la comunicación en línea o las aplicaciones de creación de contenido para demostrar los aprendizajes (Arro-yo et al. , 2014; Zhang et al. , 2022). A pesar del creciente interés en esta temática, lo cierto es que poco se conoce todavía cómo movilizar de igual forma los tres principios del DUA porque la mayoría de los trabajos se centran en describir recursos tecnológicos para promover el principio de representación y el de acción y expresión (Ertem, 2013; Jwad et al. , 2022). Paradójicamente, existen menos evidencias sobre el uso de la tecnología para fomentar el compromiso del estudiante (Bray et al. , 2023; Yot-Domínguez, 2017), así como trabajos que parten de la voz de los SAPDU a pesar de ser un apoyo funda-mental para los estudiantes con discapacidad en las universida- des (Lovet et al. , 2015; Moliner et al. , 2019). Por ello, es necesario seguir explorando esta cuestión desde la voz de los SAPDU por sus conocimientos, capacidades y recursos para contribuir en la creación de entornos de aprendizaje más accesibles para todo tipo de estudiantes. El presente trabajo parte de la perspectiva de estos servicios con el objetivo de explorar cómo se utiliza la tecnología desde el enfoque DUA para facilitar la inclusión del alumnado con discapacidad. 2. Objetivo El objetivo de este estudio es identifcar los recursos tecnoló -gicos que recomiendan los Servicios de Atención a Personas con Discapacidad en las Universidades para facilitar la participación y aprendizaje del alumnado con discapacidad en el marco del Diseño Universal para el Aprendizaje. Para conseguir dicho ob-jetivo se pretende dar respuesta a las siguientes preguntas de investigación: —  ¿Qué recursos tecnológicos recomiendan los servicios al profesorado para facilitar la participación y aprendizaje del alumnado con discapacidad? —  ¿Cómo facilitan los recursos tecnológicos el compromiso del estudiantado? —  ¿Cómo apoyan los recursos tecnológicos la representa -ción de la información? —  ¿Cómo ayudan los recursos tecnológicos en la acción y expresión del estudiantado con discapacidad? 3. Método Este estudio se enmarca en el enfoque cualitativo, un método de investigación que permite indagar sobre las propias percep- ciones de los participantes y generar signifcados a partir de sus vivencias (Miles y Huberman, 1994). Concretamente se presenta un estudio descriptivo sobre las percepciones del personal de los Servicios de Apoyo a las Personas con Discapacidad de 14 universidades españolas sobre los recursos tecnológicos que re-comiendan para facilitar la participación y aprendizaje del alum-nado desde la mirada del DUA. 3.1. Contexto y participantes El muestreo de los participantes fue no probabilístico e in-tencional al tratarse de personas expertas consideradas fuentes de información relevantes para la investigación. Participaron 17 profesionales (14 mujeres y 3 hombres) con diferentes funcio-nes dentro del servicio (técnicos, coordinadores o responsables de políticas inclusivas). El contacto con los servicios se canalizó a través de la red SAPDU. En un primer momento, se envió un correo electrónico a la coordinación con los detalles de la inves-tigación, el objetivo del proyecto y la información de contacto para que realizaran la difusión al resto de las universidades. Este correo fue posteriormente reenviado a las 64 universida-des que forman parte de esta red y, en un periodo máximo de dos semanas, fueron las personas interesadas en participar en el estudio las que se pusieron en contacto con la responsable de la investigación. Una vez establecido el contacto se consen-suaron los detalles sobre la fecha y la hora de la entrevista, así como se aclararon dudas al respecto de la investigación. Final-mente, han participado voluntariamente 14 universidades que representan a ocho comunidades autónomas. Aunque el listado de universidades participantes se presenta a continuación en la Tabla 1, se destaca que pertenecen a ocho comunidades autóno-mas diferentes y que la mayor parte de estas instituciones son de titularidad pública.
Mercé Barrera Ciurana, Carmen Márquez Vázquez, Sergio Sánchez Fuentes y Odet Moliner García Volumen 54 número 1, enero-marzo, 2025 / págs. 9-17 12 Tabla 1 Universidades que han participado en la investigación. Elaboración propia UniversidadesComunidad AutónomaTitularidadUniversidad de Cádiz (UCA)Universidad Pablo Olavide (UPO)AndalucíaPúblicaPúblicaUniversidad de Oviedo (UNIOVI)AsturiasPúblicaUniversidad de Burgos (UBU)Castilla y LeónPúblicaUniversitat de Barcelona (UB)Universitat de Lleida (UdL)Universitat de Vic (UVIC)CataluñaPúblicaPúblicaPrivadaUniversidad Nacional de Educación a Distancia (UNED)Universidad de Alcalá (UAH)Comunidad de MadridPúblicaPúblicaUniversitat Jaume I (UJI)Universitat Politècnica de València (UPV)Universitat de València (UV)Comunidad ValencianaPúblicaPúblicaPúblicaUniversidad de Murcia (UMU)MurciaPúblicaUniversidad Pública de Navarra (UNAV)NavarraPública 3.2. Instrumentos La recogida de información se llevó a cabo a través entrevis-tas semiestructuradas. Se eligió por su potencialidad para enta-blar un diálogo con las personas participantes e indagar en sus creencias y opiniones sobre su propio contexto (Ibarra-Sáiz et al. , 2023). Para llevarlas a cabo se elaboró un guion con preguntas en torno a los recursos tecnológicos que recomiendan a los profeso-res para garantizar el acceso a la información y la participación y el aprendizaje del alumnado en base a los principios del DUA. Todas las entrevistas se realizaron de forma virtual y tuvieron una duración aproximada de una hora. Por cuestiones éticas de la investigación, todos los participantes frmaron un consenti -miento informado, así como el permiso de grabación. 3.3. Análisis de los datos Una vez recogidos los datos se procedió a transcribir la in-formación con la ayuda de la extensión Tactiq y los subtítulos generados por la plataforma usada en las entrevistas. El análisis comenzó con la organización de la información por medio de un sistema de codifcación en el que se especifcaba la técnica utilizada “E” y un número según el orden en el que se realizaron las entrevistas. Algunos ejemplos de codifcaciones de las entre - vistas son “E_1; E_2; E_3”. Cuando era una entrevista grupal se seguía el procedimiento anterior añadiendo el personal técnico (T) que hablaba en cada momento “E_4_T1”. Una vez codifca -das se llevó a cabo un análisis de contenido, un método siste-mático conformado por diferentes fases que permite reducir los datos para interpretarlos posteriormente (Schereier, 2014). Para navegar por la información recabada nos apoyamos en la versión más reciente del programa Atlas.ti. Todas las entrevistas se leye- ron diversas veces y se seleccionaron las unidades de signifcado más relevantes. Estas se fueron organizando en categorías y có-digos relacionados con el objeto de estudio. Se siguió una lógica deductiva al clasifcar cada unidad de signifcado según los tres principios del DUA y las pautas para su aplicación, y también in- ductiva al codifcar los recursos tecnológicos recomendados por los servicios. Para garantizar la rigurosidad del análisis se de-batieron todas las categorías y códigos hasta llegar al consenso. 4. Resultados En este apartado se muestran los resultados obtenidos en este estudio. Para facilitar su comprensión se adjunta la Tabla 3, que sintetiza la relación entre las tecnologías descritas y el marco -ba-sado en sus Pautas, en la versión 3.0- del DUA (CAST, 2024), junto con la frecuencia con la que se han mencionado en forma de por-centaje. En los siguientes apartados se desarrolla su exposición. 4.1. Recomendaciones de los servicios sobre el Principio de Compromiso Si comenzamos a observar la tecnología asociada al principio de compromiso, los resultados obtenidos han señalado que úni-camente se utilizan materiales audiovisuales con el propósito de motivar al alumnado. En concreto, una pequeña parte de los par-ticipantes expresó que la problematización de alguna cuestión de las asignaturas mediante vídeos podría aumentar el compro-miso del estudiantado, lo cual se relaciona con la pauta Diseñar opciones para acoger intereses e identidades y la consideración sobre optimizar la relevancia, el valor y la autenticidad de lo que se trabaja en clase (7.2). “En el ámbito de las ciencias es muy típico por parte del pro-fesorado utilizar un vídeo motivador sobre planteamiento de un problema” (E_1). Con respecto a las pautas Diseñar opciones para mantener el esfuerzo y la persistencia y Diseñar opciones para la capacidad emo-cional no se han identifcado recursos tecnológicos que traten de promoverlas. Sin embargo, el personal de los servicios considera que es el propio alumnado quien debe tener sus propios recursos para mantener su esfuerzo y gestionar la frustración a lo largo del aprendizaje. “Desde aquí también se les hace mucho hincapié en que ellos también tienen que tener herramientas para el estudio y para aguan- tar la frustración…” (E_4). 4.2. Recomendaciones de los servicios sobre el Principio de Representación Los y las participantes consideran fundamental que la infor-mación que se transmite al alumnado sea accesible, por lo que la mayoría de sus recomendaciones se centran en promover el principio de representación del DUA. Específcamente, sugieren evitar los materiales escaneados en sus asignaturas porque pue- Tabla 2 Recursos tecnológicos y su relación con el DUA. Elaboración propia TecnologíasPrincipiosPautasConsidera-ciones % Material Audiovisual Múltiples medios de CompromisoDiseñar opciones para acoger intereses e identidades7.2 7% Formatos personalizables Múltiples medios de RepresentaciónDiseñar opciones para la percepción1.1 84% Variedad de recursos 1.2 79% Subtítulos 1.243% Imágenes 1.228% Readspeaker 1.27% ClaroRead 1.228% Blackboardally 1.1/1.228% Productos de apoyo 1.2 79% Sistema FM 1.236% Bucle magnético 1.214% JAWS 1.229% Lupas 1.221% Aula Virtual Diseñar op-ciones para el desarrollo de conocimiento3.3 57% Productos de apoyo Múltiple medios de Acción y ExpresiónDiseñar opciones para la interacción 79% JAWS 4.1/4.229% Licornio 4.1/4.27% Lupas 4.1/4.221% Ratones específcos 4.1/4.27% Vías para la comunicación Diseñar op-ciones para la expresión y comunicación 57% Correo Electrónico 5.121% Tutorías Virtuales 5.1/5.386% Foros 5.114% Chats En Línea 5.114% Evaluación por ordenador 5.2 71% Tutorías Virtuales Diseñar opciones para el desarrollo de estrategias6.1/6.2 86% Grabaciones 6.3 43%
Mercé Barrera Ciurana, Carmen Márquez Vázquez, Sergio Sánchez Fuentes y Odet Moliner García Volumen 54 número 1, enero-marzo, 2025 / págs. 9-17 13 den generar barreras para acceder al contenido, sobre todo para alumnado con discapacidad sensorial. Para eliminar estas barre-ras inciden en utilizar formatos personalizables en relación con el tamaño del texto, la tipografía o el color. La posibilidad de que el alumnado personalice la visualización de la información en función de sus preferencias se vincula la primera consideración de la pauta del DUA Diseñar opciones para la Percepción (1.1). “Se está trabajando el tema de diseño de materiales accesibles y es que una de las cosas importantes es que se le pierda el miedo al Word, se empeñan en utilizar siempre los Pdf.” (E_8). Siguiendo con la pauta anterior, la mayoría de los y las par-ticipantes también sugieren complementar la información que se transmite con audio, imágenes, vídeos o texto. Cabe destacar que estas recomendaciones varían dependiendo del tipo de dis-capacidad, pues para el alumnado con dislexia priorizan el canal auditivo dadas sus difcultades en la comprensión lectora y, para el alumnado con TEA, hacen hincapié en formatos más visuales para apoyar la información y evitar las ambigüedades. “Yo siempre les digo que utilicen herramientas que les lean los textos porque los alumnos con dislexia tienen que emplear muchísi- ma energía y esfuerzo en una lectura comprensiva” (E_3). “...para los estudiantes con TEA son muy importantes los apoyos visuales, por ejemplo, a través de gráfcos, fotografías o esquemas” (E_6). Las personas participantes también se preocupan porque los materiales educativos que contengan contenido audiovisual es-tén acompañados de subtítulos. Sin embargo, no todo el profe-sorado parece estar dispuesto a proporcionarlos, lo cual termina desbordando a los servicios y, a menudo, no consiguen llegar a adecuar todo lo que se les solicita. Cuando esto ocurre, optan por coordinarse con otras facultades para que los generen e incluso contratan a personal especializado. “...la lectura es un poco dramática, porque como el profesor no lo va a hacer, vamos a contratar a una persona que esté todo el día subtitulando” (E_2). Además de estos apoyos, los servicios también recomiendan softwares para diversifcar los canales en los que se transmite y recibe la información. Algunos de los más destacados son el Readspeaker, Claroread o el BlackboardAlly. Los dos primeros se sugieren sobre todo para el alumnado con dislexia porque procesan la información textual y la transmiten simultáneamen-te por el canal auditivo. Por otra parte, el BlackboardAlly se está empezando a utilizar a nivel global en algunas universidades porque evalúa el grado de accesibilidad de las páginas web, los contenidos y los materiales subidos y proporciona orientaciones para mejorarlos en base a lo detectado. Además, este software permite al estudiante descargar los contenidos en distintos for-matos, lo que le facilita escoger en función de sus preferencias o necesidades. “...te hace una autoevaluación según vuelcas un material de su grado de accesibilidad, entonces a partir de ahí te da pautas para ir corrigiéndolo” (E_8). datos para interpretarlos posteriormente (Schereier, 2014). Para navegar por la información recabada nos apoyamos en la versión más reciente del programa Atlas.ti. Todas las entrevistas se leye- ron diversas veces y se seleccionaron las unidades de signifcado más relevantes. Estas se fueron organizando en categorías y có-digos relacionados con el objeto de estudio. Se siguió una lógica deductiva al clasifcar cada unidad de signifcado según los tres principios del DUA y las pautas para su aplicación, y también in- ductiva al codifcar los recursos tecnológicos recomendados por los servicios. Para garantizar la rigurosidad del análisis se de-batieron todas las categorías y códigos hasta llegar al consenso. 4. Resultados En este apartado se muestran los resultados obtenidos en este estudio. Para facilitar su comprensión se adjunta la Tabla 3, que sintetiza la relación entre las tecnologías descritas y el marco -ba-sado en sus Pautas, en la versión 3.0- del DUA (CAST, 2024), junto con la frecuencia con la que se han mencionado en forma de por-centaje. En los siguientes apartados se desarrolla su exposición. 4.1. Recomendaciones de los servicios sobre el Principio de Compromiso Si comenzamos a observar la tecnología asociada al principio de compromiso, los resultados obtenidos han señalado que úni-camente se utilizan materiales audiovisuales con el propósito de motivar al alumnado. En concreto, una pequeña parte de los par-ticipantes expresó que la problematización de alguna cuestión de las asignaturas mediante vídeos podría aumentar el compro-miso del estudiantado, lo cual se relaciona con la pauta Diseñar opciones para acoger intereses e identidades y la consideración sobre optimizar la relevancia, el valor y la autenticidad de lo que se trabaja en clase (7.2). “En el ámbito de las ciencias es muy típico por parte del pro-fesorado utilizar un vídeo motivador sobre planteamiento de un problema” (E_1). Con respecto a las pautas Diseñar opciones para mantener el esfuerzo y la persistencia y Diseñar opciones para la capacidad emo-cional no se han identifcado recursos tecnológicos que traten de promoverlas. Sin embargo, el personal de los servicios considera que es el propio alumnado quien debe tener sus propios recursos para mantener su esfuerzo y gestionar la frustración a lo largo del aprendizaje. “Desde aquí también se les hace mucho hincapié en que ellos también tienen que tener herramientas para el estudio y para aguan- tar la frustración…” (E_4). 4.2. Recomendaciones de los servicios sobre el Principio de Representación Los y las participantes consideran fundamental que la infor-mación que se transmite al alumnado sea accesible, por lo que la mayoría de sus recomendaciones se centran en promover el principio de representación del DUA. Específcamente, sugieren evitar los materiales escaneados en sus asignaturas porque pue- Tabla 2 Recursos tecnológicos y su relación con el DUA. Elaboración propia TecnologíasPrincipiosPautasConsidera-ciones % Material Audiovisual Múltiples medios de CompromisoDiseñar opciones para acoger intereses e identidades7.2 7% Formatos personalizables Múltiples medios de RepresentaciónDiseñar opciones para la percepción1.1 84% Variedad de recursos 1.2 79% Subtítulos 1.243% Imágenes 1.228% Readspeaker 1.27% ClaroRead 1.228% Blackboardally 1.1/1.228% Productos de apoyo 1.2 79% Sistema FM 1.236% Bucle magnético 1.214% JAWS 1.229% Lupas 1.221% Aula Virtual Diseñar op-ciones para el desarrollo de conocimiento3.3 57% Productos de apoyo Múltiple medios de Acción y ExpresiónDiseñar opciones para la interacción 79% JAWS 4.1/4.229% Licornio 4.1/4.27% Lupas 4.1/4.221% Ratones específcos 4.1/4.27% Vías para la comunicación Diseñar op-ciones para la expresión y comunicación 57% Correo Electrónico 5.121% Tutorías Virtuales 5.1/5.386% Foros 5.114% Chats En Línea 5.114% Evaluación por ordenador 5.2 71% Tutorías Virtuales Diseñar opciones para el desarrollo de estrategias6.1/6.2 86% Grabaciones 6.3 43%
Mercé Barrera Ciurana, Carmen Márquez Vázquez, Sergio Sánchez Fuentes y Odet Moliner García Volumen 54 número 1, enero-marzo, 2025 / págs. 9-17 14 Por otro lado, de forma específca para algunos estudiantes con discapacidad gran parte de los servicios informan al profe-sorado sobre la necesidad de usar determinados productos de apoyo. Algunos de los más destacados para las personas con dis-capacidad auditiva son el sistema de frecuencia modulada (FM) o el bucle magnético. El sistema FM es un dispositivo que adapta y amplifca el sonido del emisor hacia el receptor por medio de diversos elementos. En cambio, el bucle magnético es un siste-ma de comunicación que emite las señales y las transmite direc-tamente al audífono de la persona para garantizar la audición. Particularmente para el alumnado con discapacidad visual se re- comiendan lectores de pantalla o lupas específcas para ampliar los contenidos. En relación con estos productos de apoyo, cabe resaltar que los servicios valoran signifcativamente la colabora -ción con otras entidades como un aspecto crucial para garantizar los recursos necesarios para este alumnado. “Los que vienen con ceguera casi total traen sus ordenadores adaptados, la tifotecnología para leer con los dedos y demás porque desde la ONCE están muy bien atendidos” (E_4). Desde el marco del DUA, esa variedad de recursos a la hora de transmitir la información y la promoción de productos de apoyo para conseguirlo se vinculan con otra de las consideracio-nes de la pauta Diseñar opciones para la Percepción , pues permiten apoyar la percepción de la información mediante múltiples cana-les (1.2), por ejemplo, a partir de imágenes, subtítulos o platafor-mas de conversión texto-voz. Otra de las recomendaciones que realizan los y las partici-pantes es el uso del aula virtual para la anticipación de los mate- riales. Aunque parece que no siempre es sufciente porque según una parte de las personas que han participado, los contenidos de la plataforma deben estar ordenados y estructurados de forma clara. Lo anterior es un aspecto clave para garantizar el acceso y la comprensión de la información, y más cuando se trata del alumnado con TEA. “Si quiero ampliar los contenidos, pues ponemos carpetitas de ampliación por temas, todo muy ordenadito. Porque algunas perso-nas necesitan ese orden, y si lo hacemos, pues le facilitamos el acceso a la información” (E_1). “…estructurar los contenidos también ayuda mucho a los TEA. Hacemos hincapié en la estructura para crear espacios predecibles y manejables. Imagínate, profesor disperso, alumnos dispersos, eso es un caos” (E_3). La estructuración de los contenidos en el aula virtual facili-ta que cada estudiante desarrolle distintas formas de conocer y crear signifcados (3.3), otra de las consideraciones del marco del DUA, concretamente de la pauta Diseñar opciones para la construc-ción de conocimiento . 4.3. Recomendaciones de los servicios sobre el Principio de Acción y Expresión Los resultados también apuntan que gran parte de las reco-mendaciones facilitan la implementación del principio de acción y expresión. Generalmente las sugerencias de las personas par-ticipantes se centran en la promoción de productos de apoyo como una medida específca para el alumnado con discapacidad. Por ejemplo, para personas con parálisis cerebral o discapacidad visual recomiendan los lectores de pantalla, generalmente el JAWS, que son softwares con un sintetizador de voz que lee y explica lo que aparece en pantalla. En menor medida, también proponen otras ayudas técnicas como Licornio, una herramienta para el acceso al teclado por medio del control con la cabeza, así como lupas o ratones específcos para garantizar la interacción con los materiales. Estas orientaciones apoyan el desarrollo de la pauta Diseñar opciones para la interacción y sus dos consideraciones al variar y honrar métodos para la respuesta, navegación y movimiento (4.1) y optimizar el acceso a materiales y tecnologías accesibles y herramientas de asistencia (4.2). Además de lo anterior, ofrecen recomendaciones relaciona-das con las vías para la comunicación, tanto entre iguales como hacia el profesorado. Algunos de los servicios sugieren ofrecer diferentes opciones para que el estudiante escoja la vía de comu-nicación que más se le ajuste. Las más resaltadas son el correo electrónico y las tutorías, y, en menor medida, los foros del aula virtual y los chats en línea. “Muchos profesores dejan como abiertos los foros para que se pueda comentar o se pueda comunicar con el profesorado por correo o en el aula virtual también hay un chat” (E_10). Partiendo del marco del DUA, estas recomendaciones ayu-dan a promover la pauta Diseñar opciones para la expresión y comu-nicación , en concreto, una de sus consideraciones al facilitar múl-tiples medios para que todo el estudiantado pueda comunicarse de acuerdo con sus capacidades y preferencias (5.1). A pesar de las orientaciones, cabe destacar que las personas participantes sienten que muchas veces no tienen trascendencia porque es una decisión que recae sobre el profesorado, quien en ocasiones muestra resistencia a explorar otros canales de comunicación. En esos casos, los servicios tratan de mediar entre el alumnado y el profesorado para consensuar un método que se ajuste a ambas partes. “...hay profesores muy rígidos que sólo se comunican por mail y en esos casos es posible que el estudiante pida que mediemos para que el profesor atienda a la posibilidad de hablar con él por teléfono o por videollamada” (E_2). El formato para la evaluación de algunos estudiantes ha sido un aspecto controvertido. Gran parte de los participantes reco-miendan la realización de ciertos exámenes mediante el orde-nador que presta el propio servicio. Esta orientación se ofrece generalmente en los casos de alumnos con discapacidad visual, dislexia, problemas motóricos o de escritura, por lo que más que una sugerencia, suele ser una necesidad. Aunque el profesorado acepta y cumple con la recomendación, los servicios deben jus- tifcarse ante estos y aclarar la ausencia de cualquier tipo de co -nexión a la red o de información que comprometa la evaluación del estudiante. “...siempre se indica al profesorado para los exámenes que el or-denador se les proporciona desde el servicio para que esté libre de contenido y no tenga conexión a la red.” (E_9).
Mercé Barrera Ciurana, Carmen Márquez Vázquez, Sergio Sánchez Fuentes y Odet Moliner García Volumen 54 número 1, enero-marzo, 2025 / págs. 9-17 15 A pesar de lo anterior, las personas participantes reiteran que herramientas como el ordenador permiten a ciertos estudiantes seguir formando parte de su aprendizaje y poder construir y de-mostrar sus conocimientos, lo que guarda relación con una con-sideración del DUA (5.2) que conforma la pauta Diseñar opciones para la expresión y comunicación . Por otra parte, las tutorías con el estudiantado además de re-saltarse como una posible vía para la comunicación, también se recomiendan por sus posibilidades para realizar un seguimiento más personalizado al alumnado, especialmente a los estudiantes con TEA. Es más, los servicios sugieren que el profesorado sea proactivo en proponer las tutorías, a poder ser de forma virtual. Esto se debe a que a menudo estos estudiantes tienen difculta - des en la comunicación e interacción social, lo que les difculta solicitar apoyo cuando en algunas ocasiones lo necesitan. “Para reforzar todas esas dudas lo que si solicitamos son tutorías adicionales y que muchas veces el alumnado de ese perfl no lo va a demandar pues que sean ellos lo que los que lo ofrezcan sistemático” (E_12). Además, otra parte de los y las participantes consideran que las tecnologías pueden ayudar a generar espacios de comunica-ción confortables para el estudiantado con TEA al permitir inte-ractuar desde la distancia y controlar el entorno desde el que se comunica. “...con la tecnología se les abre una puerta de comunicación en la que no estás frente a esa persona. Le comunicas a la máquina y está le dirá a quien quiera, pero ya no es la misma situación” (E_14). El seguimiento personalizado para que el estudiantado sepa identifcar sus errores y pueda reconducirlos con apoyos en la planifcación y el desarrollo de estrategias para lograrlo es otro de los elementos clave de este principio del DUA. Esto se aborda en la pauta anterior y, en concreto, en la consideración sobre los apoyos graduales para la práctica y desempeño (5.3).Asimismo, según una pequeña parte de los servicios las pi-zarras digitales junto con plataformas de emisión en vivo como Bemyvega facilitan el acceso a la información y su manipula-ción por parte del estudiantado. Este tipo de recursos recogen los contenidos de la pantalla del emisor y la transferen al resto de dispositivos conectados. Además, también permiten generar grabaciones, otro de los aspectos resaltados por algunos servi-cios al posibilitar a los estudiantes acceder a la información en cualquier otro momento y procesarla de nuevo para su mayor comprensión, gestión y organización. Aunque algunos indican que es un tema controvertido para el profesorado, lo cierto es que lo valoran como algo benefcioso para el alumnado. “Hay una cosa que es un rechazo bastante frontal por parte del profesorado y es el tema de las grabaciones” (E_13) La posibilidad de grabar las sesiones favorece que el estu-diante pueda manipular la información con posterioridad, pro-cesarla y organizarla siguiendo sus propias preferencias, lo cual se vincula con otra de las pautas de este principio del DUA Di-señar opciones para el desarrollo de estrategias, así como una de sus consideraciones al abordar la organización de la información y los recursos (6.3). 5. Discusión y conclusiones Este trabajo pone de manifesto el potencial de la tecnología para favorecer un espacio de aprendizaje accesible que garantice la igualdad de oportunidades para el estudiantado con discapa-cidad en la universidad. Los hallazgos muestran cómo algunos recursos tecnológicos se recomiendan desde los servicios para personalizar el aprendizaje, fomentar la participación del alum-nado, así como garantizar la accesibilidad de los contenidos, elementos muy vinculados al DUA. Sin embargo, los resultados apuntan que existen diferencias signifcativas en la presencia de los tres principios en el contexto universitario. Gran parte de los recursos tecnológicos mencionados pro-mueven el principio de representación, haciendo más hincapié en la pauta sobre las opciones para la percepción al fomentar el uso de formatos personalizables y de diferentes vías para trans-mitir y percibir la información en función de las preferencias del alumnado (Bray et al. , 2023; Jwad et al. , 2022; Reyes et al. , 2022). No obstante, es fundamental tener en cuenta el contexto para se-leccionar las estrategias que puedan generar mayores oportuni-dades de aprendizaje y, además, acompañar al alumnado en la identifcación de los productos y estrategias más idóneas para ellos (Ertem, 2013; Sánchez- Fuentes y Duk, 2022). De lo con-trario, muchos estímulos podrían suponer una carga cognitiva adicional para algunos estudiantes, especialmente para aquellos con TEA (Barrera y Moliner, 2023). Ofrecer entornos accesibles se ha convertido en un reto para las universidades, pues ciertos estudiantes siguen constatando barreras en las plataformas y re-cursos que se utilizan (Curioso, 2021). Muchas de las institucio-nes que han participado en este trabajo se han responsabilizado de ello y buscan alternativas, por ejemplo, la integración de la herramienta Blackboardally a nivel global para analizar la acce-sibilidad de plataformas y materiales y proporcionar pautas al profesorado para su mejora. Los hallazgos obtenidos también muestran que los recursos multimedia como los vídeos contribuyen a captar el interés del alumnado, tal como apuntan Reyes et al. (2022), aunque no se identifcaron recomendaciones explícitas sobre mantener el es -fuerzo y la persistencia o la capacidad emocional. En otras etapas han explorado cómo abordar esas pautas y destacan el uso del CoRubrics para la coevaluación, así como de tecnologías adap-tativas con sistemas de tutorización inteligentes para secuenciar el proceso de aprendizaje (McCarthy et al. , 2020; Sala-Bars et al. , 2021). Sería conveniente indagar estas cuestiones en las univer-sidades, a pesar de que estas exigen cada vez más la proactivi-dad del estudiantado en la búsqueda de sus propios recursos y estrategias para el aprendizaje (Bray et al. , 2023; Yot-Domínguez y Marcelo, 2017) en lugar de acompañarles y guiarles en ese pro-ceso, aspecto crucial sobre todo para el estudiantado con TEA por sus difcultades en las funciones ejecutivas (Brightbill, 2020). Los resultados de este trabajo coinciden con otros y realzan los benefcios de las tecnologías accesibles y productos de apo -yo en los momentos de evaluación de ciertos estudiantes (Cu-rioso, 2021; Díez-Vega et al. , 2020; Edyburn, 2010). Respecto a la expresión y comunicación, las tecnologías ofrecen un amplio abanico de posibilidades y contribuyen a facilitar la comuni-cación entre iguales y con el profesorado, aspectos que de otra
Mercé Barrera Ciurana, Carmen Márquez Vázquez, Sergio Sánchez Fuentes y Odet Moliner García Volumen 54 número 1, enero-marzo, 2025 / págs. 9-17 16 forma podrían suponer un gran reto para algunos estudiantes (Rubio, 2022; Zhang et al. , 2022). Relacionado con las funciones ejecutivas y el desarrollo de estrategias, debido a que grabar las sesiones resulta ser un aspecto controvertido para el profesora- do, para facilitar la anticipación y la planifcación para afron -tar los desafíos, otras investigaciones proponen ofrecer vídeo tutoriales donde se expliquen conceptos clave o se resuelvan problemas con el fn de mostrar el procedimiento (Arroyo et al. , 2014; She y Martín, 2022). Específcamente para el alumnado universitario con TEA se han resaltado los benefcios de anti -cipar el material y facilitarlo en un entorno virtual ordenado y manipulable por el estudiantado (Barrera y Moliner, 2023; Bri-ghtbill, 2020). De igual forma que en los anteriores trabajos, los resultados apuntan que se están promoviendo las tres pautas del principio de acción y expresión. En síntesis, la presente investigación aporta posibles formas de implementar los principios del DUA mediante la tecnología en el contexto universitario. Las recomendaciones descritas anterior- mente son solo una pequeña muestra de las infnitas posibilidades que ofrece, dado que la selección y uso depende de cada contex-to, y, como se ha visibilizado, de las preferencias o necesidades de cada estudiante (Ertem, 2013; Sánchez-Fuentes y Duk, 2022). En este trabajo se ha focalizado en el alumnado universitario con discapacidad, aunque partiendo de la mirada DUA, la tecnología juega un papel clave en la participación y aprendizaje de todo el alumnado (Cabero y Valencia, 2019; Orozco y Moriña, 2023; Rose et al. , 2012). Sin embargo, las recomendaciones de los SAPDU to-davía sustentan un modelo más centrado en la discapacidad y no tanto en promover entornos de aprendizaje fexibles pensados para el conjunto del alumnado (Moliner et al. , 2019; Whitley-Gras-si et al. , 2021). Avanzar en esa idea implica una mayor colaboración entre docentes y con los servicios y entidades implicadas, un ca-mino que todavía hoy supone un reto para los SAPDU (Márquez y Melero, 2020; Moliner et al. , 2019). Sin duda, aunque este trabajo aporta un poco de luz sobre cómo la tecnología promueve el DUA, todavía es necesario cambiar la mirada para contemplar sus bene- fcios no solo para el colectivo con discapacidad sino para el resto, además de explorar las posibilidades de esta para el compromiso del alumnado. Todo ello permitirá avanzar hacia prácticas más in-clusivas que ofrezcan verdaderas oportunidades de participación y aprendizaje en la universidad. En cuanto a las limitaciones del estudio, consideramos que, a pesar de la predisposición de muchas universidades a partici-par en la investigación, sería interesante contar con más partici-pantes para seguir explorando otros recursos tecnológicos para implementar el DUA en la universidad. Otra cuestión para con-siderar es integrar también la voz del profesorado. Aunque los servicios de atención a la diversidad son especialistas en mate-ria de atención al alumnado con discapacidad, el profesorado es quien genera diariamente entornos de aprendizaje para el alum-nado. Esto nos abre una vía para ampliar la mirada en futuras investigaciones. Agradecimientos Este trabajo se ha desarrollado gracias a la fnanciación de la Universitat Jaume I a través de la ayuda PREDOC/2021/23. Referencias Alba-Pastor, C. (2019). Diseño Universal para el Aprendizaje: un modelo teórico-práctico para una educación inclusiva de ca-lidad. Participación y mejora educativa, 6 (9), 55-68. Arroyo, I., Woolf, B. 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